El ayuntamiento italiano de Castellammare di Stabia, ciudad costera cercana a Nápoles, votará hoy un nuevo reglamento de la Policía municipal en el que se prevén multas de hasta 500 euros a quien lleve vestidos con demasiado escote o minifaldas excesivamente cortas.
Su alcalde, Luigi Bobbio, prevé multas de 25 a 500 euros para todos aquellos que lleven vestidos demasiado cortos, paseen en bañador por las calles de la ciudad o digan blasfemias en lugares públicos.
Eso si, ha puntualizado que la minifalda no está prohibida y que lo que se quiere sancionar es que se muestre la ropa interior, ya sea por llevar la falda demasiado corta, vestidos o camisas que muestren el sujetador o pantalones con la cintura muy baja.
Queda claro que lo que le molesta al “moralista” Bobbio es ver ropa interior. Obviamente, la pregunta que surge es: ¿Y si no llevan ropa interior? ¿También se les sancionará si dejan entrever una parte de su trasero desnudo?
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