En las últimas ocasiones en que Aaron Ramsey, centrocampista galés del Arsenal, ha metido un gol, mucha, muchísima gente se ha preocupado. No. No nos estamos refiriendo a los jugadores o aficionados del Chelsea, Liverpool o Manchester, sus rivales en la Premier League. Quienes de verdad se preocupan son los famosos, ya sean mandatarios, empresarios, cantantes o artistas. ¿Por qué? Se lo contamos.
Todo empezó en mayo del año pasado cuando Ramsey anotó un precioso gol ante el Manchester United. Al día siguiente, Estados Unidos lanzó la operación en Pakistán que acabó con la vida de Osama Ben Laden.
Lo que no pasaría de una mera coincidencia (ese día marcaron gol otros muchos miles de futbolistas), empezó a complicarse en octubre cuando volvió a anotar, esta vez ante el Tottenham. En esta ocasión, fue Steve Jobs, fundador de Apple quien abandonó este mundo. Y ese mismo mes, le metió un gol al Olympique de Marsella en la Champions, doce horas antes del asesinato del coronel Gadafi.
Este sábado volvió a marcar, concretamente el gol de la victoria del Arsenal ante el Sunderland, y en cuestión de pocas horas encontraron sin vida el cuerpo de Whitney Houston en la bañera de un hotel.
¿Macabra coincidencia? ¿Mal fario? Suponemos que no pasa de una mera casualidad, pero si yo fuese famoso empezaría a estar atento a los partidos del Arsenal. Por si acaso.
Como desgraciadamente no lo soy, podré dormir tranquilo.
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