No cabe la menor duda de que el enlace entre el Príncipe Guillermo de Inglaterra y Kate Middleton es la boda del año. Más bien podríamos alargarlo al lustro o a la década. Las noticias surgen a diario y hoy nos vamos a quedar con la que, sin duda, ha resultado más simpática hasta ahora.
Nos estamos refiriendo a la campaña publicitaria que la marca de telefonía T-Mobile está emitiendo estos días para felicitar a los futuros esposos de una forma original. Ver a la Reina Isabel II moviendo la pelvis o a Camilla, desatada, dando un golpe de cadera al Príncipe Carlos no tiene precio.
Realmente, esta parodia de la Boda Real inglesa está inspirada en otro vídeo que dio la vuelta al mundo en su día: la entrada en la Iglesia de unos, hasta entonces anónimos, novios llamados Jill y Kevin.
Su espectacular coreografía fue vista por millones de personas y pusieron de moda en la red lo de preparar un bailecito y sorprender a todos los asistentes.Aunque la “realeza británica” se lo curra, yo me quedo con Jill y Kevin.
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