Striptease y menú del día por sólo 8 euros

Si creían que en el mundo de la hostelería ya estaba todo inventado... lean, lean esta noticia.

El bar restaurante La Campana, de la localidad valenciana de Ribarroja, acaba de recurrir a una “táctica” novedosa ante el descenso continuado de clientes provocado por la crisis. Tres veces por semana, concretamente los martes, miércoles y viernes, acompañan el almuerzo de sus clientes con un espectáculo bastante inusual en los bares de los polígonos: lucha de barro entre dos mujeres y una stripper para acompañar los postres.

Como lo leen. Sobre las 14:30, mientras los clientes se disponen a terminar sus postres y tomar un café, una de las camareras del local pone la música para dar la bienvenida a la stripper que aparece en lo alto de unas escaleras. Disfrazada de enfermera (o de lo que haga falta), con su blusa y su cofia blanca, y con unos zapatos beige de tacón de aguja, empieza a bajar, a la vez que algunos clientes silban y otros gritan entusiasmados. Cuando llega al local, la chica empieza su espectáculo: yendo de mesa en mesa, va quitándose sus prendas de una en una al compás de la música hasta quedarse completamente desnuda. Unas lo hacen muy lentamente; otras rápido para poder repetir varias veces el show. La despedida siempre es la misma: gritos, “piropos” y aplausos del público enfervorizado.

No cabe la menor duda de que la iniciativa, desde el punto de vista moral, resulta, como mínimo, cuestionable, pero lo que si está demostrado es que el acierto económico está superando todas las expectativas: tienen mesas reservadas con varios días de antelación, el local está casi siempre lleno y los clientes consumen ahora muchos más cafés y copas mientras esperan el espectáculo. Y por si fuera poco, las chicas, profesionales contratadas en una agencia, les hacen un buen precio al estar fuera de los horarios convencionales de su profesión.

Si no cambia la situación económica, no sería de extrañar que pronto, en el bar de la esquina de su calle, se encuentre a chicas ligeritas de ropa bailando al son de la canción del verano. 

.