Les presentamos el futbolín más caro del mundo

Invento de origen español, pocos, muy pocos son los que no hayan jugado con él en alguna ocasión. El futbolín es el juego más popular en nuestro país, solo comparable  los naipes, el dominó o el parchís. Pero como en todo, hay futbolines y futbolines. Y si no, miren este que les traemos.

Bautizado como 11, estamos ante el futbolín más caro del mundo. Fabricado de una sola pieza a partir de una piedra de ónix, su diseño ha costado algo más de un año de trabajo y se han utilizado exclusivamente medios artesanales para montar y ensamblar cada uno de los detalles que lo componen.

Entre sus muchos detalles exclusivos, destacan los mangos confeccionados por los marroquineros de Louis Vuitton; la iluminación ambiental, que evita la sensación de fatiga visual gracias a su efecto relajante para el nervio óptico; los jugadores de cromo pulido; los marcadores centrales luminosos que contabilizan los goles de cada equipo de forma automática gracias a unos sensores de movimiento en las porterías que detectan cada gol al pasar la bola por la línea de meta… hasta los jugadores llevan unos leds de colores para indicar su dorsal.

La base se puede escoger blanca o negra, mide 89 x 145 x 75 cm. y solo se vende previo encargo con una espera de dos meses. El precio… en consonancia con el lujo del producto: 48.500 euros. Vamos, que con lo que ahorre este mes, me compro dos.